Los años fueron transcurriendo y pasé a la secundaria con todo lo que pasaba en el pais.
Aprendí que todo el que se arrimaba a la revolución, se convertía en "delator" de los demas.
Por cosas insignificantes, se perdian amistades de muchos años.
Y detras de cada problema ó desastre estaba la sombra de la revolución.
Ya, a estas alturas, yo estaba bien claro de lo que sucedía en Cuba y los problemas que surgirian en el futuro al que no pensara como ellos .
Conocí todo tipo de gente: buena, mala, regular.
Siempre respeté las ideas de las personas, mientras no se metieran conmigo.
No le permitía a nadie que me aconsejara nada, y mucho menos si tenía que ver con la
revolución.
Utilizaba mucho un lema que aun sigue a mi lado diciendo:
-No me den consejos, que yo se equivocarme solo.
Ese era un problema que había en Cuba. La gente se metía en tu vida y al que no tuviera dos dedos de frente le acomodaban la vida al antojo de cualquiera.
viernes, 19 de diciembre de 2008
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